viernes, 5 de diciembre de 2008

Capítulo 4: La criatura y el espejo


“Toda magia está dentro de uno mismo, sólo tienes que darte cuenta de ello”


Esta vez la criatura se dio cuenta de lo sucedido y de lo que había hecho. Para pronto corrió rápidamente hacia el espejo y pudo notar que algo en ella había cambiado totalmente. Se observó poco a poco y notó que se había transformado en un ser más extraño, la imagen que veía en el espejo no era la misma que hacía unos pocos instantes. De manera que se mantuvo de frente al espejo, se miraba una y otra vez. De pronto, miró hacia abajo y vio que en sus pequeñas manos, cargaba los restos de tripa e intestino que le pertenecían a su cerdo. Aunque eso no era lo más sorprendente del asunto.Ella observaba un ojo marrón enorme, en el interior había un camino similar a un espiral o laberinto que la llevaba a su ombligo, “el centro del abismo” donde su cuerpo de mujer había quedado encerrado. Seguía conservando sus pestañas enormes, quizás lo único que al menos podía ver en el espejo mágico. Vestía un fondo de encaje y un sombrero que parecía un semáforo en rojo. Desconcertada y un tanto alterada no sólo por el crimen que había cometido, sino por la forma monstruosa que veía reflejada solamente en el espejo,un ser nuevo, extraño y verdadero.
Pocos minutos después, comenzó a sentir un cosquilleo en la sangre que recorría todo su cuerpo, después empezó a sentir paz y tranquilidad, ya para el final sintió como si alguien la estuviese cuidando en algún lado, protegida y amada. Esta vez la criatura sonrió como nunca lo había hecho y se dio cuenta que a partir de ese momento existía un lazo, no exactamente naranja, sino uno de esos que ni a través del espejo se pueden ver.
El espejo mágico era en el único ,en el que la criatura podía ver su verdadera identidad.


El cerdo ya era parte de ella y era inevitable que algo dentro de la criatura había cambiado para siempre.



2 comentarios:

Mariana Codina dijo...

El Cerdo me parece una mascota adorable para la Criatura y una buena compañía. ¿Qué va a pasar con el Cerdo ahora que la Criatura se lo comió? ¿Era un sueño?
Mariana Codina.

LA CRIATURA dijo...

No era un sueño Mariana, la criatura sí se lo comió porque tenía mucha, mucha hambre y pues lo único que estaba a su alcance era su cerdito. Pero no te preocupes, porque el cerdo siempre regresa, lee ahora el capítulo 5: Al borde del precipicio, y verás como El Cerdo aparece de nuevo, quizás esta vez sí sea un sueño.